martes, 31 de julio de 2018

Camino de Podgorica

31 de julio de 2018
Después de desayunar y ordenar las cosas intentamos pedir al casero que llame a un taxi pero él ve el mensaje tarde y decidimos bajar a la calle a pillar uno por nuestra cuenta. Resulta complicado porque se ve que en Montenegro la gente usa mucho el taxi llamando previamente. Al final lo conseguimos y llegamos a la estación de guaguas, donde compramos los billetes y nos ponemos a esperar la guagua. Como siempre tarda muchísimo en llegar, cerca de una hora después de lo previsto.
El camino se nos hace bastante corto, y después de media hora llegamos a la capital Podgorica. Tomamos café y aprovechando el wifi nos ponemos en contacto con la encargada del alojamiento. Hablamos con un taxista que no quiere timar cobrándonos 5 euros con lo que decidimos coger otro que pone taxímetro y nos cobra 2 con propina incluida. Llegamos al apartamento. Está muy bien situado y la ciudad empieza a seducirnos a pesar de que tenga poco que ver y del calor que hace.
Comemos en un bar modernito, visitamos una galería de arte y nos vamos huyendo del calor al apartamento a dormir la siesta. Nos vamos otra vez a la estación de guaguas donde compramos pasajes para ir el jueves a las 10:00 a Albania. Damos vueltas por lo que queda del casco antiguo, o sea una torre reloj, un par de mezquitas y un puente con una playita donde tomamos cervezas con fondo de música new age. 
Acabamos el día con una serie larga de cervezas en varios bares de la ciudad, interrumpiendo la sesión de borrachera con una cenita en una crepería. Es increíble la gente que hay a pesar decser un martes.

Zona de baño en el río de Podgorica

Museo en Podgorica

Puente de Podgorica

Camino de Cetinje

30 de julio de 2018
Nos levantamos y desayunamos en el apartamento, hacemos de nuevo las maletas y recuperamos nuestros pasaportes que los tenían los caseros. 
Comprobamos que nos han dado de alta en el sistema de visados para turistas. La dueña nos propone llamar a un taxi que nos recoge y nos lleva a la estación. Los taxis son muy baratos y solo nos cuesta 2€. 
Compramos los billetes para Cetinje y la empleada nos dice que en unos minutos llegará el bus. Es cierto que pronto llega una, pero suben unos cuantos y se llena. Otra vez a esperar una hora.

Subimos a nuestro transporte y de camino conocemos a dos parejas de españoles con los que entablamos una agradable conversación. El bus para en Budva una de las ciudades más turísticas de Montenegro y nos alegramos de habernos saltado está parada.
Tras hora y media de un bonito paisaje en el que vemos a lo lejos Sveti Stefan, la ciudad más fotografiada del país.
A la llegada a Cetinje contactamos vía Whatsapp  con nuestro simpático casero. Nos recoge en su coche y nos lleva a su coqueto apartamento. 
El lugar está  muy bien con sala, comedor, cocina, balcón y dormitorio.
Salimos a comer al Kole el restaurante mejor valorado por el Tripadvisor. Comida honesta y abundante sin florituras. Servicio agradable y buen precio.
Salimos a dar vueltas por el pueblo pero en seguida empieza a llover. Emili visita un monasterio (Serge se niega al ver que le ponen un chador a una chica...), el antiguo palacio real que cuesta 5 euros entrar (sale a los 10 minutos) mientras Serge juega a adivinar las contraseñas de las conexiones wifi de los locales... Después de varios intentos consigue 2 de 6 conexiones. Se ve que aquí no tienen mucha imaginación: ponen el nombre del local y 123, 2018, o 2017 si se despistan.
Vamos a turismo a ver si conseguimos un mapa pero nos piden 1 euro por una copia mal hecha. Renunciamos. Emili se corta el pelo mientras Serge se toma la primera cerveza. 
Después de la segunda cerveza vamos a comprar para cenar. Cenamos en el apartamento y nos vamos de copas por el pueblo, es increíble como se ha animado por la noche... Unas cuantas cervezas más y a dormir la mona.
Budva desde el autobús

Simpáticos montenegrinos

Sveti Stefan desde el autobús

Casa en Cetiña

Grafitis

Antigua embajada francesa

Antiguo palacio real

Curiosa escultura

Perast y Kotor

29 de julio de 2018

Emili se levanta más temprano y va de compras para el desayuno en una tienda cercana.
Desayunamos y salimos hacia la estación para ir a Perast. 
Otra vez tenemos que esperar casi una hora a que llegue. Perast es un pueblo pequeño que tuvo un pasado glorioso con montones de iglesias y palacios. Esta a 15 minutos de Kotor y se ha convertido en una parada de muchos turistas. También se puede hacer en excursión en barco desde Kotor.
A la llegada paseamos por el pueblo, nos bañamos y dudamos si ir en barco a las curiosas islas de enfrente. Ambas tienen una iglesia que ocupa casi todo su espacio. Una católica y otra ortodoxa. 
Nos bañamos en el mar, aunque por las montañas y la forma cualquiera diría que es un lago suizo.
Comemos unas buenas pizzas, Serge vuelve a bañarse y volvemos a kotor tras esperar media hora a una guagua. 
Bajamos cerca del apartamento y compramos comida en un super.
Nos duchamos y salimos paseando a visitar la preciosa ciudad vieja de Kotor. Hoy con más tiempo apreciamos su belleza y su clase, con muchas tiendas de artesanos esparcidas por el recinto amurallado.
Visitamos la catedral, bebemos cervezas y cenamos lubina y una buena botella de vino montenegrino ( krstač) en un restaurante, Scorpio, de una de las encantadoras placitas del recinto.
Hoy hay programado un concierto de jazz en una de las plazas. Hacemos tiempo tomando cervezas en un pub encantador también dedicado al jazz.
Al final oímos el concierto desde el local ya que la plaza está llena.
De camino al apartamento tomamos las últimas a la orilla del mar en un pub del paseo.

Islas de la Bahía 

Pueblo de Perast

Detalle de las islas-iglesia

Barco en Perast

Enormes montañas de la bahía de Kotor

Detalle de la muralla de Kotor

Calle de Kotor

Serge y Kotor

Detalle de la catedral

Montenegro: Herzeg Novi y Kotor

28 de julio de 2018

Durante la mañana hemos visitado Herceg Novi bajo la lluvia. Durante el periodo de descanso nos hemos bañado en la playa. Por la tarde hemos ido a Kotor donde hemos cenado con Antón que andaba por la zona.

Baño en Herceg Novi

Ruinas de una antigua fortaleza

Herceg Novi

Cenando con Antón en Kotor

Esperando el autobús de Kotor con nuestro amable casero Vasilievic

Dubrovnik

27 de julio de 2018

Hemos conducido desde Mostar hasta el aeropuerto de Dubrovnik. Hemos tenido hacer una larga cola para atravesar la frontera entre Bosnia y Croacia. Hemos visitado la impresionante ciudad de Dubrovnik bajo un calor sofocante y rodeados de hordas de turistas.
Por la noche nos hemos trasladado a Herceg Novi atravesando por segunda vez una frontera en la que hemos pasado más de 2 horas. al a llegada a Herceg Novi nos esperaba pacientemente nuestro amable casero después de 2 horas y media de retraso.

Dubrovnik de cartel

Calle de la ciudad amurallada

Vista desde el castillo

Mapa de la ciudad bombardeada

Detalle de una iglesia

Turistas y más turistas

domingo, 29 de julio de 2018

Cascadas de Kravica y paseo por Mostar

26 de julio de 2018

Hoy jornada de baños en las agradables cascadas de kravica rodeados de turistas y bosnios a partes iguales.
Serge dándose un buen baño


En las cascadas





jueves, 26 de julio de 2018

Llegada a Bosnia-Herzegovina: Mostar

25 de julio de 2018

Hoy hemos recorrido la ruta entre Korcula y Mostar en Bosnia-Herzegovina.
De camino hemos visitado las murallas de Ston y un precioso pueblo musulmán llamado Pocitelj. Nos sorprende la amabilidad de los habitantes de Mostar. Paseamos por el espectacular puente y sus alrededores

Mostar y su precioso puente

Última vista sobre la ciudad de Korcula

Las murallas de Ston

Salinas de Ston

Vista aérea de las salinas

Vista del pueblo Pocitelj

Mezquita de Pocitelj

Mostar desde el famoso puente

Ciudad antigua de Mostar

Turistas fotografiándose con el puente de fondo

Vista de Mostar

Heridas de guerra aún no cicatrizadas